Componentes peligrosos I Parte 2
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Methylisothiazolinone: Provoca reacciones alérgicas e irritación de la piel, hasta dermatitis. Se sabe que es tóxico para la piel.
Parabenos: Se utilizan para prolongar la vida de los productos cosméticos y se pueden encontrar en el 99% de los productos de amplio consumo, farmacéuticos, así como «biológicos – naturales». Los parabenos son derivados del petróleo y causan alergias e irritación cutánea severas, y también son tóxicos. En su composición contienen un sustituto de la hormona femenina, llamado xenoestrógeno, es decir, falso estrógeno. Se absorben a través de la piel y crean trastornos hormonales desde una edad temprana, que a la larga ocasionan problemas de fertilidad, cáncer de testículo y de mama.
Parafina: también un derivado del petróleo en forma de cera o aceite, conocido como aceite de parafina. Se utiliza en muchos cosméticos y es tóxico. Provoca irritación ocular y cutánea cuando entra en contacto. Obstruye los poros y crea manchas oscuras.
PVP: Nocivo por inhalación y absorción a través de la piel. Provoca irritación ocular. Irrita las mucosas y el tracto respiratorio superior. Es uno de los componentes que pueden causar carcinogénesis.
Propylene Glycol: Derivado del petróleo. Se utiliza para lubricar la piel. Lo puedes encontrar en una amplia gama de cosméticos. Aumenta los niveles de ácido en el cuerpo, provocando problemas con el metabolismo, el hígado y los riñones. También puede provocar reacciones alérgicas. Actúa dando una sensación de frescor e hidratación, mientras que de hecho absorbe la humedad de las capas inferiores de la piel. Cabe señalar que para tener efectos secundarios y los síntomas correspondientes, es necesario consumir cantidades muy grandes.
Sodio cáustico: contenido en cosméticos principalmente limpiadores como jabón y champú. Es un componente que se utilizó para alcantarillados bloqueados. En grandes cantidades puede provocar quemaduras y daños irreparables en el organismo. Pero en este ingrediente, así como en la potasa cáustica, no podemos culpar. Los jabones más naturales y saludables, como el de Marsella o el verde, para hacer la combinación de aceite y agua necesitan pequeñas cantidades de sosa cáustica que una vez que el jabón ha madurado no puede dañar el organismo. El motivo de referencia es claro para no volverse excesivo y extremo en relación al uso de cosméticos.
Sodium Laureth sulfate, sodium lauryl sulfate: Forma compuestos nitrogenados cancerígenos cuando se combina con ingredientes específicos. Se utiliza en champús y otros cosméticos como limpiador. Provoca irritación ocular y pulmonar, erupciones cutáneas e irritación cutánea e incluso caída del cabello. Es dañino si se ingiere y puede causar lesiones oculares graves. Por supuesto, existen productos químicos y vegetales de aceite de coco que no son dañinos para el cuerpo.
Sebo: producido a partir de grasas animales. No es apto para vegetarianos y puede provocar irritación cutánea. Se utiliza en muchos cosméticos de uso diario. Provoca irritación cutánea. El hecho de que no conozcamos el origen de la grasa animal de la que se produce, hace peligroso el uso de productos que la contienen.
Tolueno: se encuentra principalmente en productos para uñas y lociones quitaesmalte. Producido durante la fabricación de gasolina y otros combustibles de petróleo crudo y carbón. Se evapora a la atmósfera cuando los productos que contienen este ingrediente se dejan abiertos. Puede afectar el sistema nervioso y causar fatiga, confusión, debilidad, náuseas y anorexia.
Debido a que no podemos evitar el uso de cosméticos y sobre todo cotidianos y necesarios como jabón, la pasta de dientes o protector solar, es bueno estudiar detenidamente los ingredientes que contienen los cosméticos que compramos. El uso de cosmética natural en la que se detallan los ingredientes es la mejor solución, y que no tengan el aroma o color especial que encontraremos en una crema con los ingredientes anteriores.
Lea sobre los ingredientes peligrosos en la parte 1.
