El secreto de un bronceado intenso que durará, se esconde en 3 factores en total. La primera es la dieta adecuada con hierbas y verduras ricas en vitaminas, la segunda es la exposición al sol por la tarde y la tercera es la exfoliación corporal frecuente!
El azafrán, también conocido en Grecia como crocos de Kozani, es una de las hierbas nativas del sur y este de Europa y de Asia occidental. Como ya sabéis, existen muchas especies autóctonas de azafrán en Grecia, mientras que prefiere las zonas semi-montañosas. Al ser una planta bulbosa, es perenne y puede alcanzar una altura de hasta 25 cm.
La acción cosmética de la Hierba de San Juan es bastante limitada debido principalmente a la fotosensibilidad que la caracteriza. El aceite y cualquier crema que contenga su aceite, deben usarse solo por la noche para evitar la irritación de la piel.
El apio es una de las hierbas que más utilizamos en la cocina, pero pocos conocemos las propiedades realmente beneficiosas que lo caracterizan. Su fuerte aroma hace que muchas personas lo eviten, pero sin tener en cuenta el valor nutricional del apio, retirándolo de su dieta.
La semilla de girasol, además de su gran valor nutricional y propiedades terapéuticas que ofrece al organismo, también tiene varias aplicaciones cosméticas, principalmente con el uso de su aceite.
El alto contenido de aceite de girasol en vitamina E, lo hace ideal para combatir los radicales libres, protegiendo la piel del envejecimiento prematuro. Contribuye significativamente a la reducción de las arrugas finas, especialmente alrededor de los ojos, mientras rejuvenece las células.
"Que tu medicina sea tu alimento, y el alimento tu medicina."
